La Tajadera (núm. 52-53), otoño de 2023
En las pasadas elecciones del 23 de julio fueron escogidos nuestros representantes en las Cortes Generales. Entre los escogidos en ambas cámaras legislativas, para el caso que nos ocupa destaca un nombre: el de María del Mar González, escogida diputada por el Congreso de los Diputados por Zaragoza, aunque nacida en Fuentes Claras en 1978. Podríamos decir que estamos ante la primera representante en Cortes nacida en este municipio del Jiloca; sin embargo, no es así. Hace doscientos años fue escogido otro fuentesclarino y para ello hemos de remontarnos a las Cortes de Cádiz. Estamos hablando de Joaquín Gómez y Blasco.
Gómez nació en Fuentes Claras en 1774, perteneciente a una familia de propietarios rurales y ganaderos del municipio. En un momento dado la familia se trasladó a Zaragoza, donde viviría el resto de su vida. No sabemos en qué circunstancias abandonó Fuentes Claras y cuáles fueron desde entonces sus vínculos con su tierra de origen, aunque es probable que los mantuviera por vía familiar. Posiblemente era pariente del religioso Miguel Gómez y Cabello, también fuentesclarino y fallecido en Zaragoza en 1756, reputada personalidad de su tiempo, autor de los populares Gozos del Pilar y primer enterrado en la Cripta de la Basílica, como reseñamos en en su biografía publicada en el número 38 de esta revista, en junio del año pasado.
En la capital aragonesa Gómez cursó la carrera de Derecho, examinándose en 1795 y logrando ser doctor en Jurisprudencia, siendo miembro del Real e Ilustre Colegio de Abogados de Zaragoza. De su familia heredó y mantuvo en Zaragoza un importante poder económico como hacendado, con más de 3.000 cabezas de ganado en tierras propias o arrendadas. Gracias a ello fue miembro de la Casa de Ganaderos de Zaragoza, institución corporativa de gran poder que conciliaba a grandes propietarios de ganado de Aragón, así como a mayorales y pastores. Desde 1811 ocupó diversos cargos relevantes en la institución: Teniente de Justicia (1811-13), Mayordomo (1813-14), Procurador General (1818-20), y el más importante de todos ellos: el de Justicia, en dos periodos (1814-18 y 1820-21).
Gracias a su actividad como abogado y en la Casa de Ganaderos su figura tuvo un papel socialmente relevante, lo que le permitió desarrollar una destacada carrera política. Así, en 1804 ingresó como regidor en el Ayuntamiento de Zaragoza, cargo al que entonces no se accedía por elección sino por herencia. Allí se mantuvo hasta su muerte, mostrando un perfil audaz político, adaptándose a los diferentes regímenes políticos de aquellos años. Baste decir que Gómez asumió su puesto como regidor durante el reinado de Carlos IV; luego mantuvo su puesto durante el reinado de José Bonaparte; sobrevivió a los sitios de Zaragoza y a todo el periodo de la Guerra de Independencia; permaneció en su puesto durante el periodo de las Cortes de Cádiz (salvo unos meses, en 1814); allí siguió durante la monarquía de Fernando VII y, finalmente, durante el Trienio Liberal hasta su muerte. Sin duda hizo gala de gran capacidad de adaptación, navegando entre la monarquía absoluta y el constitucionalismo, luchando contra el francés y gobernando bajo ellos, en tiempos de guerra y paz.
Su relevancia política le dio la oportunidad de participar en el proceso electoral para elegir los diputados para las Cortes de Cádiz por Aragón (entonces circunscripción única), que en 1813 renovaban el arco parlamentario. El 27 de octubre del mismo año tuvo lugar el proceso electoral y Joaquín Gómez logró ser elegido al obtener 26 de los 27 votos emitidos (entonces el sistema de elección no era universal, sino censitario). Sin embargo, fue escogido como tercer y último suplente. Los dos primeros, Ramón Aznar y Pedro Ger, llegaron a ser nombrados diputados; no así Gómez, pues a los seis meses, en mayo de 1814, las Cortes de Cádiz fueron abolidas por Fernando VII.
Por tanto, Joaquín Gómez y Blasco fue el primer fuentesclarino elegido a Cortes, aunque como suplente y sin tiempo suficiente para poder llegar a tomar posesión. Falleció en Zaragoza en 10 de noviembre de 1821, su cadáver fue depositado en la Seo de Zaragoza y seguidamente enterrado.